Madre Dominga Guzmán Florit nació en Río Piedras, Puerto Rico, el 3 de septiembre de 1897. Fue la hija mayor de cinco hermanos del segundo matrimonio de su padre viudo, que junto a los cuatro hijos mayores de la matrimonio anterior, formaban una familia muy unida. El dolor tocó su corazón al enfermar y morir su padre cuando ésta contaba con sólo ocho años y perder su madre tres años más tarde. Vivió un año interna en un orfelinato en Santurce. Consiguió una beca de las Hermanas Domincas de la Santa Cruz(Amityville) para estudiar en los Estados Unidos. Allí descubre el llamado de Dios para servir a la Iglesia ingresando en esta Congregación a los quince años. Decide estudiar pedagogía para poder regresar a Puerto Rico a trabajar con los suyos.
En el 1916 llega a Puerto Rico a servir en diferentes conventos de su Congregación como maestra. Llegó en el 1925 a Yauco donde tres años más tarde la responsabilizan del Internado del Colegio “Holy Rosary” hasta el 1949, siendo además en los últimos seis años superiora de la comunidad. Desde allí, palpando la necesidad material y espiritual de las familias, siente la llamada particular de Dios a hacer algo. Iluminada por el Espiritu Santo y con el consentimiento de sus superiores, inicia una congregación puertorriqueña al servicio de la familia con el lema:”Llevar a Cristo a la familia y la familia a Cristo” y para colaborar con los sacerdotes en la pastoral parroquial.
Su delicada salud no fue obstáculo para llegar a ser una gran alma misionera desde el sagrario. Su confianza total en la Divina Providencia la mantuvo siempre muy clara que esta Obra de Amor era de Dios y El se encargaría de llevarla a feliz término. De profunda vida de oración, siempre se encontraba con el rosario en las manos y vecina del Santísimo, ya que desde su cuartito contemplaba el sagrario. Desde el silencio de su aposento se convirtió en Apóstol de la familia: orando y sacrificándose por todas las intenciones que le encomendaban. El Señor le permitió beber Su cáliz y partió junto a su Amado el 16 de enero de 1993, tras una dolorosa gravedad.
Entre sus frases favoritas encontramos:
* “Para Dios siempre lo primero y lo mejor”
* “La gracia de Dios hace posible lo imposible”.
Si le interesa conocer más sobre Madre Dominga Guzmán y su obra puede visitar la Casa Madre de las Hermanas Dominicas de Fátima, Carretera 116 de Yauco a Guánica o dirigir su correspondencia a: Hermanas Dominicas de Fátima PO Box 62 Yauco, Puerto Rico 00698.
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Si alcanza algún favor, escriba a:
Causa Beatificación Madre Dominga
P.O. Box 62
Yauco, Puerto Rico 00698-0062
o vía correo electrónico a :[email protected]
Hermanas Dominicas de Fátima, Yauco – Puerto Rico
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